Amor de migrantes






Sus ojos son marrones, como los tronco de las palmeras de las costas venezolanas. La miro sentada en el parque de la capital de un país lejano al que la vio nacer y pienso en su vida y los giros y giros que ha tenido que afrontar. 

Si un adivino le hubiese hablado a su oído para develar su destino, dudo que le habría creído, pues tanta vorágine sería difícil de imaginar posible. La voz premonitora, de haber pronunciado palabra le habría dicho algo así:

 "Siendo bella doncella será una mujer la que el corazón te arrebate. El hilo que a ella te unirá será tan fuerte, que cuando el descalabro azote al Bravo Pueblo de Bolívar viajarán al sur frío del continente a armar una nueva vida, una llena de esperanza, lejos de la tierra llanera. El país de manto de flores bordadas, la copia feliz del edén, abrirá sus puertas esquivas, las que lentamente se acostumbrarán a recibir a cientos de desplazados. La tienda de un hombre de oriente te dará trabajo, venderás bisutería, perlas que brillan, cuentas que adornan, pero un bulto en tu cuerpo cambiará tu camino. El coreano no te querrá enferma, te expulsará del reino del brillo. Desalmado te dirá que no sirves para el puesto de trabajo, justo en ese momento, en ese, que más lo necesitas. Sabrás el diagnóstico, en tierra sin arepas, sin hallacas, de inviernos fríos, pero saldrás adelante. Sabrás de incertidumbre, de porqués y sin saberlo labrarás un nuevo destino. Tu pelo se caerá, sentirás como el viento acaricia la piel de tu cabeza, pero como la testaruda esperanza, el cabello volverá a crecer. Tu vida tiene sorpresas que no esperabas, pero será la fuerza que te hará trazar un nuevo camino, uno inesperado". 

La vuelvo a mirar sentada en la banca del Parque Forestal, veo como el sol cae entremedio de los árboles que la iluminan junto a su bella amada. Veo sus estrellas que cuelgan del cuello, una luz que las une. Veo el elefante dorado como medalla, yo sé que es Venezuela, es su mapa, es su tierra, esa que en la lejanía, en la inclemencia, nunca se olvida.

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